Gráfico de Comercio Exterior de Ecuador

ECUADOR: UN SUPERÁVIT HISTÓRICO, ENTRE EL BRILLO AGRÍCOLA Y LA SOMBRA PETROLERA

Desentrañando las cifras del primer trimestre de 2025: ¿un boom sostenible o una fortaleza frágil?

El primer trimestre de 2025 nos revela un escenario de contrastes para el comercio exterior ecuatoriano, un ballet de cifras donde el dinamismo de lo no petrolero danza con la cautela de la energía. El Banco Central del Ecuador nos entrega un boletín que, si bien irradia optimismo con un **superávit total de USD 2.288,0 millones**, la cifra más alta registrada , nos invita a una lectura más atenta, a indagar en los pilares que sostienen este éxito y en las grietas que la vorágine global aún puede abrir.

EXPORTACIONES: LA DIVERSIFICACIÓN COMO IMPERATIVO (USD 9.302,4 millones)

Las exportaciones ecuatorianas brillaron con un valor total de USD 9.302,4 millones, marcando un **crecimiento interanual del 15,2%** . Esta expansión, sin embargo, es un tapiz tejido con hilos de diferente resistencia.

1. El Resplandor No Petrolero: El Verdadero Motor (USD 7.048,5 millones)

Aquí reside la fuerza, el pulso que nos impulsa. Con un crecimiento interanual del 26,8% , las exportaciones no petroleras son la estrella de este período, sustentadas por una **mejor valoración de la oferta exportable** .

2. La Fragilidad Petrolera: Menos Producción, Menos Ganancia (USD 2.253,9 millones)

En contraste, las exportaciones petroleras cayeron un **10,5% interanual** . El principal culpable: una **menor producción** debido a la rotura del **Sistema de Oleoducto Transecuatoriano (SOTE)** por un deslizamiento de tierra (declarado "Fuerza Mayor") y el **cierre progresivo del bloque ITT** desde agosto de 2024 . Aunque el precio promedio del barril ecuatoriano repuntó trimestralmente, la **caída interanual del 4,5%** y la **disminución del 6,3% en volumen** son un recordatorio crudo de la **vulnerabilidad** de depender de un recurso extractivo y de su infraestructura. La brecha con el WTI se redujo ligeramente , pero la tendencia global de menor dinamismo y la adopción de vehículos eléctricos anticipan **desafíos persistentes** .

Destinos Principales: Un Mapa de Concentración. Panamá (principalmente por petróleo) con 21,7% y EE. UU. (primer destino no petrolero) con 19,4% siguen siendo nuestros socios clave . China asciende como el segundo socio no petrolero con el 17,8% , destacando su demanda de camarón y concentrados mineros.

IMPORTACIONES: UN AJUSTE NECESARIO Y UNA MIRADA AL FUTURO (USD 7.004,1 millones)

Las importaciones se contrajeron un 5,9% trimestral, a USD 7.014,4 millones . Esto se debe a menores compras de bienes de consumo y combustibles tras un cuarto trimestre de 2024 con importaciones extraordinarias (estiaje, reposición de inventarios) .

Sin embargo, a nivel interanual, las importaciones **crecieron un 10,0%** , impulsadas por:

BALANZA COMERCIAL: UN SUPERÁVIT IMPULSADO POR LA AGUDA VISIÓN NO PETROLERA (USD 2.288,0 millones)

El resultado total de USD 2.288,0 millones es un **máximo histórico** . Pero el verdadero protagonista es el **superávit no petrolero de USD 1.676,4 millones**, también el más alto desde que se tiene registro . Este saldo positivo, a pesar de la caída del superávit petrolero (USD 611,6 millones, una reducción del 43,8% interanual) , subraya la **creciente relevancia de la diversificación** en la ecuación comercial del país. Es un éxito, sí, pero es un éxito que nos obliga a mirar más allá del petróleo.

COMPETITIVIDAD: UN BAILE ENTRE PRECIOS Y PARIDAD

CONCLUSIONES: NAVEGANDO UN FUTURO EN CLAVE DE DIVERSIFICACIÓN

El primer trimestre de 2025 nos regala un panorama de **fortaleza en lo no petrolero**, demostrando la **resiliencia y adaptabilidad** de nuestros sectores agrícola y minero, impulsados por la innovación y la búsqueda de nuevos mercados. Sin embargo, la **vulnerabilidad del sector petrolero** subraya la imperiosa necesidad de **profundizar la diversificación** de la matriz exportadora.

El histórico superávit es una base sólida, pero la volatilidad global — tensiones comerciales, aranceles, desafíos logísticos y ambientales— exige una **visión estratégica y una política comercial audaz**. Es el momento de fortalecer las inversiones en productividad, innovación y sostenibilidad para consolidar estas ganancias y asegurar que el pulso exportador de Ecuador siga latiendo con vigor, independientemente de los vaivenes del oro negro.